Fotografía: Agencia AFP


El papa Francisco designó un equipo de religiosos, entre ellos los dos mayores expertos en pedofilia, el arzobispo maltés Charles Scicluna y el jesuita alemán Hans Zollner, para coordinar la cumbre mundial sobre el abuso sexual de menores en la Iglesia que se celebrará en febrero en el Vaticano.

"El papa Francisco quiere que los líderes de la iglesia comprendan a fondo el impacto devastador sobre las víctimas que significa el abuso sexual por parte del clero", explicó Greg Burke, portavoz de la Santa Sede.

Los jefes de las 113 conferencias episcopales del mundo fueron convocados por el pontífice argentino para una cumbre extraordinaria que busca prevenir los abusos sexuales por parte del clero, un escándalo que ha desacreditado la institución en todos los continentes.

El evento, el primero de ese tipo, se llevará a cabo del 21 al 24 de febrero y quiere ser una respuesta concreta al escándalo de la pedofilia dentro de la iglesia y su encubrimiento.

"La reunión es ante todo con los obispos, porque ellos tienen la gran responsabilidad de lidiar con ese grave problema. Han sido invitados hombres y mujeres expertos en el campo del abuso para que con sus contribuciones ayuden a establecer lo que hay que hacer para garantizar transparencia y responsabilidad", explicó el portavoz.

Forman parte del comité organizador además del arzobispo de Scicluna y el padre Hans Zollner, el cardenal estadounidense Blase Cupich y el cardenal indio Oswald Gracias.

Monseñor Scicluna acaba de ser nombrado en el influyente cargo de secretario adjunto de la Congregación para la Doctrina de la Fe.

El religioso es conocido por haber investigado sobre los escándalos más graves de pedofilia que han azotado a la Iglesia: el del cura chileno Fernando Karadima y el del cura mexicano Marcial Maciel, ambos condenados ya ancianos por abusos sexuales cometidos a menores a lo largo de una larga trayectoria religiosa.

Conocido por sus posiciones a favor de las víctimas y verdugo implacable contra los abusadores, Scicluna estuvo a cargo en 2005 de la investigación contra el fallecido fundador de los Legionarios de Cristo, el mexicano Maciel, protagonista de uno de los mayores escándalos de pederastia en la historia reciente de la Iglesia, famoso por su adicción a las drogas y tener una doble vida con varios hijos.

A principios de este año, el religioso fue enviado por Francisco a Chile para escuchar a los testigos que deseaban hablar sobre el caso del obispo chileno Juan Barros, inicialmente defendido por el papa y protegido de Karadima, lo que generó una serie de críticas y protestas contra el pontífice argentino.

El jesuita Zollner, también es uno de los mayores expertos en el tema de abusos sexuales en la Iglesia y pidió recientemente una reforma del derecho canónico para poder juzgar a los obispos abusadores, como solicitan laicos, religiosos y víctimas.